lunes, 31 de enero de 2022

Una estúpida canción

Una estúpida canción

Canción


Una estúpida canción

como tantas o ninguna

de las andan por ahí.

Una estúpida canción

sin la suerte inoportuna

de hacer famoso a su autor.

Una estúpida canción

que ni Lennon ni Mac Cartney

se atrevieron a escribir.

Una estúpida canción

que si fuera de Sabina

no la hubiera escrito yo.


Una estúpida canción

con un aire de aspirante

a algún Grammy de ocasión.

Una estúpida canción

de una tarde un tanto tarde

de una noche por caer.

Una estúpida canción

que no rima pero arrima

y si no dígalo usted.

Una estúpida canción

que en la web de Don Cervantes

nunca habrá de aparecer.


Una estúpida canción

con un premio a la osadía

que a la vez me he dado yo.

Una estúpida canción

que requiere de un idiota

que sea buen compositor.

Una estúpida canción

de esas que traen dinero

nada más que al productor.

Una estúpida canción

de esas que el que escucha salta

y el que toca aún no cobró.


Una estúpida canción

lleva un dejo de verdad

un poco de rebelión

y muy poca inspiración.

Una estúpida canción

sólo debe sonar bien

en las arcas del que al fin

nunca la llegó a escribir.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 30/01/22  18.18

Ni de coña

Ni de coña

Canción


Ni de coña me imagino a la Eiffel sin su París,

La Cibeles sin Madrid. los Beatles sin Liverpool.

Me resultaría extraño un bombín sin su Winston,

daiquiri sin su Hemingway, un habano sin Fidel.


No me cabe en la cabeza un bastón sin su Chaplin,

un bolero sin Ravel, un principio sin su fin.

Pero tengo muy en claro lo que yo sería sin ti:

no querrás adivinarlo, lo tendrás que presumir.


Por brindarte alguna pista

te podría comentar

que marcharme de tu lado

no me va a sentar tan mal.

Ni puta gracia te haría

si te llego yo a contar

que me marchó con la aurora

con la que se llama igual.

Esa misma de quien dices

trigo limpio no ha de ser

pero si aún así lo fuera

no la quiero pa hacer pan.

Sólo espero que cooperes,

no te pongas a gritar,

pases página a la historia,

que lo nuestro no va más.


Ni de coña me imagino no me vayas a agredir,

no me quieras maldecir, ni me cantes tu bemol.

Me resultaría extraño que no armes un follón,

no me digas qué caray, no la tomes con mi piel.


No me cabe en la cabeza que no espetes que soy ruin,

no me digas cerdo infiel, ni me llames Frankenstein.

Pero tengo muy en claro lo que haría en lugar de ti:

no querrás adivinarlo, lo tendrás que presumir.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 27/01/22  20.16

Por eso sueño

Por eso sueño

Canción


Tengo la tinta, tengo el tintero,

tengo la pluma, tengo el papel;

lo que no tengo son las palabras

de lo que quiero poner en él.


Tengo los sueños, tengo un lucero,

tengo la luna, tengo la sed;

lo que no tengo son esos labios

donde los míos puedan beber.


Tengo la risa, tengo la prisa,

tengo la vía, tengo su tren;

lo que no tengo son los motivos

para que el viaje me siente bien.


Tengo los ríos, tengo los mares,

tengo la barca, tengo la red;

lo que no tengo son las certezas

de que tú en ella quieras caer.


Tengo mis manos, tengo mis ojos,

tengo mis piernas, tengo mis pies;

lo que no tengo es todo aquel cuerpo

que entre mis brazos pueda caber.


Tengo mis idas, tengo mis días,

tengo mis tiempos, tengo un hacer;

lo que no tengo son los momentos

que yo a tu lado quiero tener.


Lo tengo todo y no tengo nada

por eso sueño para tener

las pocas cosas que necesito

para que puedas vivir en él.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 30/01/22  15.31

Expiación

Expiación

Coplas


En la ventana una sombra

se deja ver con temor

pa que nadie reconozca

que es la sombra de un amor.

Una sombra en la ventana

y a la reja atao un clavel

decolorando su pena

por lo rojo que ayer fue.


En la casa hubo una niña

cuya sombra es la que ves

porque un ave de rapiña

le puso cal a su sien.

Una niña hubo en la casa

que envejeció de dolor

a la que el sol ya no abrasa

porque la abraza el pudor.


En la penumbra deslumbra

en la luz se hace apagón

y en el fuego de su karma

se hiela de irritación.

Deslumbra en la penumbra

la luna en su habitación

y una silueta macabra

se pasea sin ton ni son.


Todo se mueve en silencio

quieta grita a viva voz

que pago muy caro el precio

de aquel amor tan precoz.

Se mueve todo en silencio

menos su respiración

al verse a fines del juicio

que le dará expiación.


La casa llora tristeza

la puerta luce un crespón

mientras la vida bosteza

recostada en un cajón.

Llora tristeza la casa,

se abre el frío portón,

libera al fin a la presa

que se encarceló de amor.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 30/01/22  17.18

Entrar en damas

Entrar en damas

Canción


Si me dieras a elegir

entre damas o ajedrez

te prevengo que yo soy

de los que gustan saltar

que me muevo como alfil

no defiendo a ningún rey

y me gusta entrar en damas

sin peones que arriesgar.

Como soy un caballero

sin caballo que montar

ni preciso de escaleras

ni de torres de guardar

te libero de esas piezas

que por cierto están demás

y te invito a que por cierto

no te dejes capturar.


Por lo visto no eres fácil de montar

o tal vez sólo me quieras provocar

un descuido de mi parte

o un traspié de tu vaivén

puede hacer que nada de esto acabe bien.


Van dos horas o algo más

mi reloj ya no da más

sin embargo es la ocasión

y me niego a renunciar

a este juego tan sutil

de asediarme con tu piel

y creer que me desarmas

cuando todo está al armar.

Si bien yo no soy torero

sé muy bien como lidiar

que el que apura desespera

si es que no sabe aguardar

por lo tanto el ser traviesa

cada vez me incita más

a mostrarte que en tu puerto

hoy voy a desembarcar.


Por lo visto no eras fácil de montar

o tal vez te diste tiempo para actuar

un espero de mi parte

y un regreso a tu vaivén

pudo hacer que todo esto acabe bien.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 30/01/22  19.44

Cuando pienses en mí

Cuando pienses en mí

Canción


Cuando pienses es mí

no te dejes mentir

ve a una esquina cualquiera

en la que haya algún bar

pide un negro café

una pizca de sal

y conoce el sabor

de lo que sabe mal.


Cuando pienses en mí

no te quieras oír

vete hacia la nevera

que allí vas a encontrar

en su puerta un cartel

con la clara señal

que he perdido el furor

y me echado a volar.


Cuando pienses en mí

no hagas más que reír

ponte ropa ligera

anda y vete a vagar

sabes que te salvé

en la flor de tu edad

del amargo licor

de beber soledad.


Cuando pienses en mí

no te olvides de ti

piensa en la primavera

que ya está por llegar

dale el gusto a tu piel

lanza un fino sedal

hazte de un nuevo amor

y comienza a olvidar.


Cuando pienses en mí

ten presente que al fin

fui tan sólo madera

que ahora debes quemar

échame pues a arder

que verás que al final

lo que queda es carbón

y cenizas nomás.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 27/01/22  21.39

Anzuelo o pez

Anzuelo o pez

Canción


No pensé fuera tan pilla

hasta que me desperté

y vi el cuero, mi alcancía de bolsillo,

con los pliegues del revés.


Si en la noche fue atrevida,

más de lo que imaginé,

no me quejo, ya que no pasó el rastrillo

como si fuera un ciempiés.


Entre sombras y carencias

no se alcanza a conocer

que el que busca o el que encuentra

pueda ser anzuelo o pez.


Entre copas y vapores

hay un velo arrobador

que te nubla los sentidos

y te oculta al cazador.


No la vi muy enterita

y de eso me aproveché;

fui un iluso, me fumó como un pitillo

y yo me dejé encender.


Si en la cama fue mí ardilla

y en su boca fui su nuez,

no lo dudo, si no se llevó mi anillo

es que ha de volver por él.


Entre sábanas revueltas

se llega a reconocer

si la seda que te seda

es de tela o es de piel.


Entre dudas y temores

hay un dejo de ilusión

que acelera los latidos

cuando está en juego el amor.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 30/01/22  14.37

jueves, 27 de enero de 2022

Y ahora supe para qué

Y ahora supe para qué

Canción


La encontré una primavera,

una noche en luna llena,

reflejando su figura

en el espejo del río.

Me acerqué, estaba llorando

lágrimas de cocodrilo

sobre la tumba de un hombre

devorado por su amor.


Lloraba pero fingía

con su disfraz de dolor

aún sabiendo que fue ella

el puñal que lo mató.

Mentía lágrimas vivas,

mentía, lo sé muy bien,

porque en sus ojos veía

que lo mató con placer.


Tras su mirada inocente

se refugia una serpiente

que porta sobre su boca

besos de veneno y sal.


Mueve el cielo sus estrellas

con luciérnagas que vuelan

titilando entre esa oscura

sensación de amor tan frío.

Mientras tanto aún oscilando

como un péndulo sin hilo

no vi que era yo ese hombre

el fruto del desamor.


Más veía, más moría,

mas ya muerto y sin color

no pensé que fuera ella

quien de pena me mató.

Nociva, quién lo diría,

cicuta de hielo y hiel,

decirme que me quería

y ahora supe para qué.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 27/01/22  18.05

No es sencillo

No es sencillo

Canción


No es sencillo

encajar la llave,

traspasar la puerta,

encender las luces

y ver que no está.

No es sencillo

correr las cortinas,

abrir las ventanas,

dejar que entre el aire

y no respirar.

No es sencillo

sentarse a la mesa

con un sólo plato,

su silla vacía

y evitar llorar.

No es sencillo

encender la tele,

leer algún libro,

escuchar un disco

y no recordar.

No es sencillo

tenderme en la cama

sin tener cobijo

ni alguien a mi lado

a quien abrigar.

No es sencillo

todas las mañanas

pegarse una ducha

sin tener su cuerpo

para enjabonar.

No es sencillo

ver que en la cocina

hay café y tostadas

pero faltan ganas

de desayunar.

No es sencillo

convivir sin ella

en este castillo

que no es más que arena

de un desierto mar.

No es sencillo

ya seguir fingiendo

que no estoy muriendo

entre los cimientos

de la soledad.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 27/01/22  13.30

miércoles, 26 de enero de 2022

La fama

La fama

Canción


Entre las flores de Andalucía

tengo un geranio, tengo un clavel,

tengo una mora, boca de fresa,

que cuando besa me sabe a miel.


Con la verbena de los hechizos

huele a verano mi corazón;

son los azahares del limonero

y el naranjero de una pasión.


Sea a la puerta, sea a la reja,

sea debajo de algún balcón,

ando de ronda toda la noche

siempre volando de flor en flor.


Sangre en las venas, sangre caliente,

sangre en las notas de mi canción,

sangre en las cuerdas de mi guitarra,

sangre en los dedos y el diapasón.


Tengo la fama de aventurero

y algunos piensan soy un truhan

aunque no robé más que los besos

que toda boca deje robar.


Alma de niño, cuerpo de hombre,

sed de cariño, sed de calor,

vivo bebiendo mi sed de amores

en la cantina del cazador.


Canto colores, pinto sonidos,

ardo en el hielo, me enfrío al sol,

nado en los cielos, vuelo en los mares,

muero de vida, vivo de amor.


Soy como el vino de los trigales,

como la viña que amasa el pan,

soy prisionero, soy carcelero,

soy el candado a mi libertad.


Como del plato de los instintos

cuando el instinto suele invitar

algún bocado tan abocado

que aquí en mi boca sepa a manjar.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 26/01/22  18.41

El cigarrito

El cigarrito

Canción


Se sentó en la misma mesa

que ella acaba de dejar.

Pidió helado de cerezas

y una copa de champán.

Encendió aquel cigarrito

que juró que iba a dejar

y cerró fuerte los ojos

como quien teme volar.


Entre humos de los duros

no tardó en poder viajar.

Se contaba cuántas veces

esa mesa los vio hablar.

Eran tiempos de alegrías,

fantasías e inventar

esas historias ficticias

que también hacían llorar.


De su herida en el costado

no se quiso ni acordar

aunque siempre aquella espina

fue más fría que un puñal.

No quería desangrarse

en el medio de aquel bar

por temor a otros recuerdos

que allí lo puedan matar.


Con el helado deshecho,

sin burbujas el champán,

se bebió todos los restos

del naufragio en el amar.

Asió el borde de la mesa

como quien se va a aferrar

de algo lo mantenga a flote

viendo que se puede ahogar.


Tiró lejos la colilla,

llamó al mozo pa pagar

y se desplomó en la silla

al ver que no daba más.

Encendió otro cigarrito

pero ahora pa olvidar

que una vez en esa mesa

ella le agendó su mal.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 26/01/22  17.42

martes, 25 de enero de 2022

Si tú quieres pido un taxi

Si tú quieres pido un taxi

Canción


Me dijiste que te ibas a marchar

y te dije sin dudar, pues vete ya,

toma todo lo que te quieras llevar

pero deja acomodado lo demás.


No me dejes esa foto

ni el cuadro a medio pintar

y no olvides las pastillas,

las vas a necesitar.


Cuando tengas la maleta

preparada avísame

que no sea en las escaleras

tu te vayas a caer.


Si tú quieres pido un taxi

o si lo prefieres bien

te acompaño a que lo cojas

donde más te de placer.


Hace frío aquí en las calles de Madrid

por lo tanto no te dejes de arropar

ponte el bleiser que trajiste de París

o si acaso tu chaqueta de astracán.


Llévate también mi libro,

el que acabo de empezar,

es aquél con las anillas

porque ya me se el final.


No te olvides la maceta

con tu planta de rapé

ya sabéis que esas humeras

nunca las compartiré.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 25/01/22   19.49

Con las puertas abiertas

Con las puertas abiertas

Canción


Con las puertas abiertas de par en par

me esperó la noche entera según dijo pa charlar;

era el sitio inapropiado y acepté

para oír desde su boca y así luego decidir

si debía de quedarme o al fin yo debía partir

a olvidarme de los besos que me daba a flor de piel,

a enredarme en otros brazos, a volver renacer

o quedarme en su submundo para al fin enloquecer.


Con las puertas abiertas me entró a tentar

como si ella ya supiera que no dejaría de entrar;

no era afecto a los dados y aposté

para ver si es que la suerte se apiadaba hoy de mí

con dos cubos hiel y hielo para así poder fingir

si llegara yo a embriagarme con su gusto a caña y miel,

a perderme en el tejido de una araña de temer

o alejarme ya de ella y empezar a enmohecer.


En la ventana de su boca que alborota

estalló mi boca loca en mil cristales de pasión.

Abrió las alas y el paisaje cobró aire

despertando pinceladas que cambiaron el humor.


Con las puertas abiertas de par en par

me tuvo la noche entera pero no era pa charlar;

era un sitio apenumbrado y me quedé

para ver si entre las sombras se podía distinguir

si era ella aquella misma que hace un tiempo conocí,

un retrato con maltrato, una foto un tanto infiel,

un remiendo en un retazo, un afiche en la pared

o un fantasma en el castillo del marqués de no creer.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 25/01/22  16.19

En la hoguera de Nerón

En la hoguera de Nerón

Canción


Estaba entre la espada y la pared,

los arqueros apuntado, los lanceros disparando.


Mientras tanto ahí yo de pie no pude esquivar el hacha

cuando aquél frío puñal me dobló como un papel.


Por lo visto que alguien me quiere mal muerto

y tomó las precauciones para que eso fuera cierto.


Ante tanta insinuación por verme yermo

me pregunto si algo etéreo le ha de tener compasión

a mí cuerpo que aún caliente y medio entero

se preserva de las fieras en el circo de Nerón.


Pues que cumplan mí deseo de ser humo entre los fuegos

de ese juego que los locos encienden de sinrazón.


Que en la hoguera de Nerón me utilicen de carbón

y si queda algo de mí que lo esparzan en la brisa

ya que si viajo de prisa menos durará el dolor.


En la hoguera de Nerón no arde troya sino yo.

En la hoguera de Nerón se refugia el dictador.

En la hoguera de Nerón no arden brujas ardo yo.

En la hoguera de Nerón se inspiró la inquisición.

En la hoguera de Nerón aún el tiempo no expiró.

En la hoguera de Nerón que hoy pinta de otro color.

En la hoguera de Nerón ni siquiera Dios lloró.

En la hoguera de Nerón el tirano se forjó.

En la hoguera de Nerón, en la hoguera de Nerón,

en la hoguera de Nerón hoy la llama es de neón.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 24/01/22   13.46

No sé por qué

No sé por qué

Canción


Ella me daba de beber todos los días

la poción de fantasía

necesaria pa mí vida.

Cada mañana alzaba vuelo y a su espalda

se cargaba entera mí alma

pa llevarla hasta la orilla.


Hasta la orilla de un recóndito remanso

donde todo era distinto,

donde se olvidara el tiempo.

Era la brisa de mis locas primaveras

y a la vera de mis sueños

ella me enseñó a volar.


No sé por qué

ella un día se fue sin decir nada,

con la mirada malhumorada.

Cargó sus trapos en un maletín de mano,

se pegó la media vuelta

y dio un gran golpe de puerta.


Desconsolado, sin razón y enmudecido

le vi prisa al alejarse

poco a poco de mí vista.

Quedé clavado como santo en un madero

en la cruz de un no lo entiendo

sin más aire que un suspiro.


En un suspiro se cayeron los pilares

que hicieron me derrumbara

en mí muro de lamentos.

Desde aquél día que me he muerto estando en vida

esperando la salida

de este tren sin alegrías.


No sé por qué

aún no desperté de esta humorada

pa ver si era broma pesada.

Volteé la almohada pero allí ya no hallé nada

más que la almohada desierta

y una lágrima ya seca.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 25/01/22  11.41

Tan absurda como burda

Tan absurda como burda

Canción


Como perro en la nevera de un cochino tenedor

me libre de ser bocado en las fauces de Edenor

y ahora que me he puesto pilas prestaré más atención

al andar bordeando el hueco de la oscura tentación.


No te mezcles con profetas que no tienen religión

y te atienden de parado por la prisa de su dios

nunca bebas de la pila que el demonio la llenó

cuando vio mordiendo el queso al ratón que da el sermón.


No te comas esa pera que da desesperación

ni te atrevas al pecado que te ofrece el pescador

el anzuelo está a la vista y es que cumplas con tu rol

de ser la lombriz de hueso que rellena su colchón.


Cómo dijo un tal Joaquín

a esto le falta un buen brillo

qué mejor que un estribillo

pa que brille esta canción

tan absurda como burda

que fue escrita de un tirón.


Cuando veas una teta piensa en quien ya se quemó

al notar que otra a su lado ya es manzana que mordió

el gusano no es de seda pero causa sedación

aunque luego quedes preso por comer la prohibición.


Cada juez con su juerguera saca jugo a su elección

y el político avezado saca el jugo a su elector

que el idiota lo merezca ya no entra en discusión

pero que sufras por ello no merece ni perdón.


Si es que ves algo que repta que no atraiga tu atención

mejor es hacerte a un lado pa evitar la picazón

no hagas caso de esas lenguas que te silban la canción

que es un canto de sirenas en el mar del mal de amor.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 24/01/22  13.00

Salta Heil

Salta Heil

Canción


Con bombín, un Johnnie Walker

y con dos dedos en V,

se encamina un tal Sir Winston

calle abajo al namber ten;

lleva en mano una correa

predispuesto a sujetar

a un austriaco alocado

y a sus ganas de ladrar


Cabo Adolfo va callado

y aunque es un perro cruel

un bozal bien ajustado

ya no lo deja morder;

se lo ve tan asustado,

ya nadie le dice "Heil",

por la cola entre las patas

lo podrás reconocer.


En un bunker sin cemento

que una cucha sólo es,

se entretiene con un hueso

mientras mira el verde inglés;

aprendió a ser educado

y se esfuerza en merecer

que el mismísimo Sir Winston

lo mime de cuando en vez.


Cabo Adolfo al fin y al cabo

ya dispuesto a obedecer

aprendió a lamer la mano

a quien le dio de comer;

se dedica a hacer piruetas,

la cola lo mueve a él,

todo Londres lo festeja

y le gritan "Salta Heil".



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 24/01/22   18.37

lunes, 24 de enero de 2022

La dueña de la prisión

La dueña de la prisión

Canción


No era difícil refugiarse en su pollera

pero sí que era imposible penetrar su corazón.

Era guerrera, desalmada, sin fronteras,

con las armas siempre prestas para el sexo de ocasión.

Desde su ombligo y a una cuarta de destino

me adentré en un laberinto sin cartel de evacuación.


Ella se engarza sobre mi espalda

y abrocha el broche sin compasión.

Muerde mi lengua, lame mi boca

y enciende lunas de sol a sol.

Me mata y muere, me ata y desata

me envuelve y vuelve sin solución.


No era sencillo de esquivar tantos ardores

ni tampoco yo quería que ella dejará de hacer.

En el puñal de su sonrisa había la prisa

de asestar la dentellada que alimente su placer.

Por la cascada de su espalda me deslizo

hasta el monte del hechizo a encontrar mi perdición.


Ella se queja pero me deja

y apronta el goce sin dilación.

Se vuelve espuma sobre mis olas

y abre su playa de mar en mar.

Me besa y tiesa, me rapta y repta

sobre la arena de su colchón.


No era soluble en aguas de enamorarse

ni era afecta a los altares ni a libretas de prisión.

No más mirarla para entrar a encandilarse

con el brillo penetrante de unos ojos de farol.

En la maraña de su pelo hay una araña

que no pica pero atrapa en su red de seducción.


Ella me quiere pero no me ama

y entiende el juego de la traición.

Puede ser mía, puede ser tuya,

pero no entrega su corazón.

Tiene la reja, tiene la llave,

ella es la dueña de la prisión.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 24/01/22   14.57

Una historia de amor

Una historia de amor

Canción


Estas son las desventuras

de un marinero francés

que viajó de polizonte

en el Arca de Noé

al notar que sin pareja

estaban la oveja y él.


Pobre el pobre marinero

que se acostumbró a comer

en el prado equivocado

aunque lo hizo con placer

pues la oveja era educada

y lo dejaba pacer.


Ya salvados del Diluvio

y alejados del algún mar

fue que ambos se alejaron

a algún remoto lugar

donde no existieran lenguas

que los puedan cuestionar.


Cuando es que la oveja bala

el disparo salió ya

porque luego al marinero

se lo escucha festejar

entre el be be de la oveja

y el que quiere beber más.


Lo cuenta Woody Allen

con la voz del doctor Ross

sobre aquel pastor armenio

no es ni verdad ni ficción

simplemente es una historia

créalo usted o no.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 24/01/22  13.34

El pariente del Oriente

El pariente del Oriente

Canción


Heredó una vieja casa

allá lejos donde el tiempo

se quedó durmiendo inviernos

junto al frío del lugar,

con goteras sin agujeros,

una mesa de tres patas,

un banquillo, un utensilio,

un hornillo de hacer pan

y un aroma a primaveras

que se hacen esperar.


En el viejo cobertizo

un oxidado rastrillo,

una pala sin su mango

apta para descansar

y escondida y abrigada

bajo una lona quebrada

una antigua Siam Lambretta

despintada, sin pedal,

con las gomas desinfladas

como prueba de su edad.


Entre libros y papeles

encontró una foto rota,

un retrato sin su marco

y en un mapa una señal

que indicaba sutilmente

algún sitio en el oriente

de donde llegó el pariente

que acababa de heredar,

que según las cantan las fuentes

llegó huyendo de algún mal.


En el triste cementerio

no hay más tumbas que la suya

ya que no hay gente en el pueblo

que se quedé allí a morir

sin embargo está radiante

siempre cubierta de flores

aunque ese sea un misterio

que nadie revelará

y a mí me queden las dudas

por qué es que yo estoy acá.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 24/01/22   12.21

domingo, 23 de enero de 2022

Que no no no

Que no no no

Canción


Que no no no que no le puedo leer

dijo el tartamudo mirando un papel

y es cierto no sabe leer

por lo tanto el tarta no leyó el papel.


Mira que es bonito el niño

dijo un hombre ciego con gran candidez

mientras le palpaba el seno

a aquella muchacha de unos veintitrés

que como si nada dijo son dos niñas

sólo que a la otra no la quiso ver.


Que no no no que no le puedo creer

dijo el tartamudo cuando le conté

y es cierto no se debe creer

si lo que te cuentan uno no lo ve.


Hay que ver con cuánto ingenio

puede el limosnero atrapar su pez

si se trata de dinero

le tira el anzuelo de que cojo es

y luego a hurtadillas se fue de rapiña

con la pata rota sobre sus dos pies.


Que no no no que no puede correr

dijo el tartamudo al cruzar con él

lo cierto es que así fue a saber

que no es cojo el cojo si puede correr.


Hecho luz de su infortunio

se fue transmutando su gélida tez

al saberse verdadero

sin farsa a la vista que deba esconder

ni tintas, ni afeites que al fin se destiñan

como con el ciego y el cojo esta vez.


Que no no no que no lo supe ver

dijo el tartamudo con su buena fe

lo cierto que él es lo que es

que a leer se aprende y a truhan nacer.



Letra: Juan Carlos Martínez

R. de Escalada, 23/01/22  20.13

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