Contra el viento de la vida
Zamba
Sin aroma, sin color, despetalada,
una flor muere de poco y olvidada
sin saber que quien la herido ya se ha ido
como aquel antiguo amor atormentado.
En la casa sólo quedan cosas muertas
encerradas tras la rejas de una puerta;
todo tiende a ser grisáceo como el tiempo
de una tarde somnolienta y tan incierta.
Es otoño, casi invierno y su alma herida
contra el viento de la vida se le oxida;
el sabor que hay en su boca es tan amargo
como dulce habrá de ser tanto letargo.
Hay un árbol, un jardín y un ermitaño
dando vueltas a través del desengaño;
gira en torno de un reloj que sin sentido
da los días de su viejo calendario.
Todo huele a soledad, a paz sin calma,
mientras todo alrededor se desenalma
y una luz amarilleando aquel retrato
se desvela poco a poco ante su drama.
Letra: Juan Carlos Martínez
R. de Escalada, 13/12/21 16.18
No hay comentarios.:
Publicar un comentario